Esta vivienda unifamiliar parte del ejercicio de tomar un volumen regular, partirlo y desplazar sus partes buscando generar diferentes vistas y espacios exteriores que acogerán diferentes usos; hacia el frente se ubica la terraza principal con vista al mar y asoleamiento durante la tarde, aunque más expuesta al viento y los vecinos del condominio donde se emplaza. Otro patio hacia el nor/oriente de la vivienda se conforma con un lugar exterior con asoleamiento durante la mañana hasta el medio día, protegido del viento por la vivienda y oculto de la vista de los vecinos, acoge los usos nocturnos con su quincho y fogón, y regala un lugar exterior de buena calidad incluso en los días de mucho viento.
Se incorporan elementos como bodega, ducha exterior, una gran cocina que se constituye como el corazón de la vivienda, desniveles y quiebres que otorgan dinamismo y diferentes cualidades espaciales a los distintos recintos de la casa.